Otro año apoyando el desarrollo personal y colaborando con las personas de las diferentes áreas de esta municipalidad, pionera en Argentina en iniciativas de reciclaje e innovación social, junto a mi amiga y socia, Julieta Araya.
Junín, se encuentra a unos 50 Km de Mendoza capital, y siempre me ha inspirado la vocación de servicio de las personas que integran la plantilla de esta institución, lideradas por el intendente Mario Abed que con su equipo de gobierno, ha traído 25 facultades universitarias, han recuperado una bodega improductiva que han puesto al servicio de los pequeños productores, abonándoles la uva por adelantado-, y en la planta de reciclado, fabrican ladrillos elaborados a partir de desechos de plástico, construyendo con ellos viviendas sociales. Todo un ejemplo.
Este año, hemos trabajado por un lado con los mandos intermedios del gobierno municipal abordando su propósito y papel, con una nueva situación que reta sus competencias y funciones, y por otro (en las fotos), con las personas del área de Desarrollo Social con su directora Jesica Bayardi a la cabeza, que trabajan directamente con los vecinos (asistentes sociales, psicólogos, monitores, talleristas, etc.), donde la regulación emocional sido la habilidad clave, junto con la asertividad.
También tuvimos tiempo de reunirnos con el director de promoción económica, Gustavo Gil, responsable de la Bodega Municipal Raíces de Junín, que nos pidió nuestra mirada para poder vincular a los productores vinícolas (te las envío sin falta en breve, Gustavo)
Como siempre, gracias por la cercanía, la confianza y el cariño que hemos recibido y en muchos casos, por el ejemplo de vida.
¡Hasta pronto!
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